Llegó a su casa corriendo, sudando, y con el corazón a mil. Ya no sabía que creer. Estaba confundida, con miedo, temblando. Le venían recuerdos, recuerdos oscuros y movidos, sin sentido. No sabía que le estaba pasando. Fuera lo que fuera, estaba segura de que habia algo que ahora empezaba a recordar. Llegó a su casa, saltó la baya y fue por la parte trasera, donde se encontraba su ventana. Escaló, con las lágrimas brillantes entre toda la suciedad de su cara. Se había caído varias veces ya. Lo único que hizo al llegar, fue ponerse a dormir; sin querer imaginarse qué le esperaría mañana.
- ¡ELIZABETH! Despierta YAAAAAAAAAA! – “Mierda, mi madre.” - Elizabeth, hija, baja al salón.
Ésta, bajó con temor, poco a `poco, mientras el corazón se le iba acelerando cada vez más. Estaban su madre, su padre, y Carlos allí. “Carlos… ¿Qué hace Carlos aquí?”.
- Elizabeth, te PROHIBIMOS que te vuelvas a juntar con ese “amigo” – dijo su padre resaltando la palabra en cuestión – nunca más.
- ¿Qué? ¿Qué amigo papá? Yo no conozco a ningún tal Jacke… :S
- HIJA DEJA YA DE MENTIRME! – Gritó su madre - ¿Quién te as creído que eres para salir corriendo a noche, para mentirme, y para irte con ese maldito desgraciado que está cambiando a mi hija?
- ¿PERDONA? Para comencar, mamá, NO es ningun desgraciado, ¡joder! No le conoces, ¿y ya estas diciendo eso? ¿Sabes qué? NO quiero ser como tú, ¡no quiero crecer y darme cuenta de que me e convertido en una persona como tú!
Carlos iba hablar, pero su madre enfurecida le calló con un gesto. Luego, se azercó lentamente a Elizabeth, enfurecida, y le pegó una cachetada. Elizabeth, sorprendida, y con mirada de odio, se escapó corriendo. Por mucho que le chillaran, ella ya no escuchaba nada. Nada le calmaría en ese instante. Así que siguió corriendo, hasta el parque. Ni ella misma podria decir cuánto rato estubo allí, sentada en un columpio.
Al cabo de poco, o mucho rato, alguien le pasó los brazos alrededor suyo, con una calidez que le produjo un escalofrío. Luego, lentamente, Jacke se acercó a su oreja, y le susurró:
- Y bien… ¿Cómo ha ido?
- Pfff.. Jacke… Estoy harta. No confian en mí, y ¡no quieren que me junte contigo! My god, ¿pero qué esta pasando? Jodeeer!
- Tranquila, - siguió susurrando – pronto se aclarará todo.
Ya muy de noche, Elizabeth UN POCO arrepentida por su comportamiento, fue a llamar al timbre de su casa. Eso que estaba apunto, cuando descubrió que la puerta estaba abierta. Un poco extrañada, se acercó silenciosamente al salón de donde provenian esas voces…
- Ese Jacke… Me está tocando los huevos ya. Hace que Elizabeth sospeche… - Era la voz del padre de Ginny.
- Tranquilo, esa niña no se da cuenta; es muy inocente. – Era la madre de Eli – ¿Te piensas que va a sospechar de sus supuestos padres? Bah, porfavor. Además, ella no desconfiaría tampoco de Carlos, se piensa que él le quiere jajaj.
- Señor, le aseguro que ella no se da cuenta. Enserio, confia mucho en mí, y en los que cree que son sus padres, usted tranquilo. – Era… Carlos.
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LO SIENTOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO! T___T. ya avisé que tardaría mucho, pero enserio, lo siento. v_v.
Bueno, espero que os guste. Creo que la cosa se está poniendo interesante...^^
byebye, blogeras! (:
