Capítulo 8

-Bueno, y dime listo, ¿Cómo vamos a saber si la voz de el supuesto jefe es más aguda o más grave?

-Hmm... Apostaremos por la grave, y si no es esa diré que es un resfriado o algo así.

-Bueno…, Pues va llama. – Se me quedó mirando con cara de “¿qué dices?” - ¿Qué pasa?

-Hmm… ¿Cómo quieres que tenga el numero del padre de una amiga tuya? Lo tendrás que conseguir tú.

-Ah, claro, es verdad – Dije sonrojándome.

-Bueno, mañana otra vez a la misma hora de siempre y en el mismo lugar, es más, cada día en el tiempo limitado quedaremos así, ¿vale?

-Ok.

-Hasta mañana! – Me dijo todo sonriente. Le devolví la sonrisa.

Cuando llegué a mi casa, me encontré con mi madre en la cocina, sentada en una silla.

-¿Dónde estabas?

-Oh… Con J… - Recordé lo que me dijo sobre no decir nada a nadie. – Con Jonah, la perra de la vecina, dando una vuelta. Me ha pagado por ello.

-Vale… - Me miró con cara rara. No sabía si creerme o no.

Llamé a Ginny, para ver si podía quedar a dormir esa noche. Le dije que mejor en su casa, que en la mía estaba todo desordenado. En realidad yo quería quedar con ella, pero en parte era para coger el número de su padre. Me dijo que sí. Le grité desde mi cuarto a mi madre que si me dejaba, y naturalmente me dejó. Siempre lo hacía con Ginny. Hice mi mochila, y cogí un pijama del Pato Donalds, ahí todo mono ;) También me cogí un cepillo de dientes, un peine, mi móvil y un libro por si no podía dormir por la noche. También un paraguas, pues estaba nevando. Me bajé corriendo, les di un beso en la mejilla a mis padres y salí a la calle. Todo estaba blanco, era tan bonito…

Cuando llegué a su casa, ella ya estaba con pijama, y un bold e palomitas en las manos. Le sonreí, me sonrió. Siempre que quedábamos para dormir veíamos una peli, ese era nuestro lema. No dormimos en toda la noche, y no me di cuenta. Llegó la mañana y aún no había mirado su móvil. Mientras ella dormía un poco, lo cogí de la mesita de noche, y para mi suerte estaba encendido. Busqué en la agenda, y cuando lo encontré, cogí un boli y una hoja y me lo apunté. Precisamente en ese instante Ginny se despertó, y me pilló in fraganti.

-¿Qué haces?

- Puees, es que se me ha perdido el numero de Mary, y lo necesitaba. - Miró lo que tenía apuntado.

- ¡Pero si ese es el numero de mi padre!

-Oh… Yo… Aish me has pillado. Lo siento, pero no puedo mentirte.

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Ya se que es MUY corto, pero ezZque tengo TANTOS exameneees!! =(

Ajj enseriio cuando acabee estare mas tiempo haciendo mi historia ;)+

Adiios!!^^

MsStheal